martes, 30 de junio de 2009

El gatillo fácil apunta a los más humildes


El número de víctimas sigue creciendo


Los jóvenes de las villas se han convertido en el principal blanco de los policías que efectúan el abuso del poder en el uso de armas de fuego.



La villa puede ser vista como el epicentro de la marginalidad. El espacio territorial donde la violencia se encuentra en su máximo esplendor. Donde la gente que en ella vive aprende a convivir con la agresión, a crecer con el ruido constante de los tiros y balas de goma y a transitar su vida con el dolor recurrente por la muerte inesperada, a veces no, de un familiar, amigo o ser querido.
Los robos, los jóvenes corriendo en forma desesperada buscando refugio en los ranchos vecinos, los policías con sus armas en alto persiguiéndolos, los gritos de las mujeres y el llanto de los niños se transforman en el escenario repetido y rutinario que se monta en las villas de comienzo a final del día. Las historias se cruzan, se mezclan pero no se olvidan, al contrario, se convierten en una gran sumatoria de jóvenes que perdieron la vida, en un enfrenamiento duro con la “cana”, como llaman a los oficiales en su jerga.
Quizás la acumulación de estas muertes, el crecimiento acelerado de la cifra y el repudio de los familiares de las victimas, dieron lugar, en su conjunto, a una forma de llamar a la situación, de etiquetar lo que estaba pasando y de señalar a los responsables, aquellos que deberían vedar por la seguridad de los habitantes de las villas, como de todo el país. Aquellos que portan una chapa que los identifica y distingue como policías. Ahora se los conoce como los responsables del “gatillo fácil”.
“El Frente Vital”, una historia entre tantas. Víctor Manuel, más conocido, como “El Frente Vital” se convirtió, después de su muerte, en un símbolo y referente para los jóvenes de la Villa San Fernando, ubicada en el conurbano bonaerense. “Los pibes” se identifican con la historia de Frente Vital, la sienten como propia, saben que no es una utopía pensar que ellos pueden correr con la misma suerte.
Frente Vital y su muerte están pregnadas por la violencia y el mal accionar de la policía. “El santo de los pibes chorros” como es conocido, comenzó con solo 13 años a participar de pequeños robos, pero con el correr del tiempo se involucró con asaltos de mayor envergadura que le otorgaron “reconocimiento” entre sus pares.
“El Frente” había aprendido a sortear con el fantasma de la muerte, pero sabía que era imposible hacer algo para alejarla. El 6 de febrero de 1999 fue su último día. Junto con Luís, su fiel compañero, ingresaron en uno de los ranchos de la Villa, buscando refugio. Una mujer policía y dos hombres entraron con sus pistolas.
Héctor Sosa, pateó la mesa y ahí comenzó otra historia. El Frente suplicó que no le disparen y prometió entregarse. Pero fue en vano, el policía disparó el primero de los cuatro balazos, que terminó con la vida del icono de San Fernando. Sosa quedó absuelto de cargos.
El sentimiento que los une. El odio por la policía se convirtió en un fuerte lazo que une a los jóvenes de las villas. No hay un “pibe chorro que no tenga un caído bajo el accionar indebido de la “yuta” en su historia de constantes pérdidas y humillaciones. Más del 50 por ciento de los casos de gatillo fácil son jóvenes de barrios pobres. Estos hechos se convierten en noticia todos los días sin encontrar la forma de darles un fin. Según la abogada María del Carmen Verdú, en diálogo con AUNO, reveló un dato desalentador y crucial: “Desde el 25 de mayo de 2003 hasta fines de 2008, la cifra de víctimas ascendió a 1062”.
Le dicen gatillo fácil, para mí lo asesinó/ a ese pibe de la calle que en su caminó cruzó/ El se la daba de macho con su chapa policial/ lleva fierro bien polenta y permiso pa’ matar. Cantan los integrantes del grupo Flor de piedra, en referencia al abuso del poder parte de la policía. Una realidad que existe y que parece no tener límites.

lunes, 29 de junio de 2009

PERIODISMO: LA ÉTICA, LA MORAL Y LOS LÍMITES


El fin justifica el medio

Lo que importa es conseguir la última noticia, contar lo más nuevo que haya sucedido, algo innovador, que marque la diferencia con cualquier otra nota que hayan hecho los demás colegas. Para un periodista el fin justifica los medios. No importa cual sea el elemento o la forma mediante la cual logró obtener lo que después publica. Lo que interesa es llevarle a lector lo que quiere saber, darle razones y poner luz sobre las situaciones más oscuras.
El deber del periodista no escatima en lástimas ni conveniencias, no otorga prórrogas ni gentilezas. El periodista cuenta una verdad, otorga un puñado de pruebas y pelea, a cualquier precio, para tener las mejores fuentes que corroboren lo que están exponiendo.
No son Abogados ni Jueces, pero desde su lugar también buscan la justicia y se manejan con la bandera de la denuncia. Cuando algo falla, es sucio e injusto el periodista se convierte en el puente entre lo que pasa y la sociedad, asumiendo una gran responsabilidad: llevarle a la gente la mejor información.
Pueden ser criticados y hasta repudiados por su forma de actuar y escribir pero los periodistas se acuestan y se levantan con nuevos desafíos. Encontrar la verdad, poner sobre el tapete las situaciones más corruptas e intolerables y desmantelar relaciones peligrosas forman parte de su rutina.
Desde el día que comienzan a trabajar se encuentran en pleno compromiso con la gente. Ellos se transforman en el canal, el puente y la voz de la sociedad que pide a gritos saber la verdad, cueste lo que cueste, sea como sea. No importa la forma, importan los resultados.



La ética de la persona, la moral del periodista

Ser periodista implica asumir la responsabilidad de lidiar, día a día, con el vértigo y el dinamismo que la misma profesión impone. Es aceptar los tiempos, los trucos y las formas de ejercer la profesión. Aprender de las cosas buenas, tomarlas como ejemplo y alejarse, lo más posible, de los lugares comunes, la humillación y la falta de límites.
Ser un buen o mal periodista no recae, sólo, en la realización de una buena nota, la publicación de la entrevista más buscada o la creación de un informe brillante. Un buen profesional es aquel que no entrega su ética a cambio de unas líneas en el diario más importante del país, que no regala su moral por unas fotos con las que no aporta investigación y mucho menos suma información.
Ser periodista es también aprender a decir que no. A poner ante todo, la dignidad con la que creciste, con la que te formaron. Es pelar por encontrar los medios necesarios para obtener la mejor información, sin caer en la tentación del camino corto y fácil, donde encontrar material es tan rápido como destruir un hogar.
Muchas veces el exceso de avaricia, egoísmo y ambición pueden llevar al periodista a tirar por la borda todo lo conseguido a lo largo de su profesión. Quizás en la búsqueda desesperada por crecer y ser reconocido pierde la capacidad de distinguir entre el bien y el mal y es en ese momento donde se corren los límites hasta el punto de desaparecer y la ética se transforma en algo que existió pero que ya no está.

domingo, 28 de junio de 2009

Laura Alonso, Ricardo Gil Lavedra y Jorge Cardelli

Debate en la escuela de periodismo TEA



Cada uno llegó con una mochila de ideas totalmente opuestas pero todos coincidían en algo: las elecciones están cada vez más cerca y la campaña entra en el tramo final donde cualquier canal diálogo sirve para sumar votos y llegar mejor a las legislativas del próximo 28. Así Laura Alonso, quinta en la lista para diputados nacionales de Unión PRO, Ricardo Gil Lavedra, segundo por el Acuerdo Cívico y Social y Jorge Cardelli , por Proyecto Sur, cruzaron sus posturas ayer, en un debate organizado por la escuela de periodismo TEA, con la participación de los alumnos de 2do año.
Propuestas y objetivos. Los tres candidatos presentaron y expusieron “al mejor estilo de campaña” sus proyectos con los que buscarán, en caso de asumir, cambiar el curso de las cosas y mejorar la situación de diversos temas.
“El objetivo de PRO es fortalecer la autonomía de la ciudad de Buenos Aires”, sostuvo Laura Alonso, en el marco de su presentación. Además la candidata a diputada nacional hizo hincapié en la necesidad de arreglar las fallas que presenta la Reforma Electoral, mejorar las contrataciones públicas y activar la delegación de Poderes presupuestarios.
Por su parte, Ricardo Gil Lavedra remarcó la necesidad de “restablecer un Congreso fuerte y equilibrado para hacer frente a los problemas que aquejan a todos los argentinos” y expresó la urgencia de generar cohesión social y crear planes para contener a la juventud.
En representación del Proyecto Sur, Jorge Cardelli hizo foco en otros temas importantes. “La reconstrucción de las empresas nacionales públicas es fundamental” y agregó “La formación de escuelas más fuertes y buenos docentes es otro de los puntos en el que debemos trabajar arduamente”.
El adelantamiento de las elecciones. “Adelantar las elecciones es una chanchada política”, expresó Cardelli y agregó “Pareciera que el gobierno tiene que hacer un ajuste y las elecciones fueron manoseadas”. “Se las manipuló, si bien es legal, por ley, en lo que hace a las reglas del juego esto tiene que tener un acuerdo muy básico”, remarcó Gil Lavedra.
Soltando una pregunta retórica Alonso expresó: “¿Porqué no podemos vivir con normalidad? Han generado una situación complicada para las autoridades electorales. Cuando las reglas se cambian de forma violenta terminan perjudicando a todos”.
Posturas diferentes, ofertas marcadas por ideologías contrarias y con historias opuestas, los tres candidatos confrontaron sus ideas, expresaron sus puntos de vista y buscaron dar las mejores razones por las que el próximo 28 de junio sus listas deben ser las ganadoras.

El primer voto y el tan temido aplauso.


Algunas se escondían detrás de enormes y modernas gafas negras, otras transitaban la espera pensando cómo actuar al salir del cuarto oscuro y unas pocas esperaban el momento en que su participación ciudadana comenzara de forma oficial. En la mesa de mujeres de la Escuela Comercio de Bragado, ciudad ubicada a 210 kilómetros de Capital Federal, votar por primera vez fue todo un acontecimiento.


La presidenta de mesa y sus fiscales disfrutaban –quizá a modo de venganza por recordar tan lejana su primera votación– al ver llegar a las jóvenes cuyos documentos no evidenciaban rastros de elecciones anteriores. “Cuando salgas te vamos a aplaudir con mucha efusión. No te escondas detrás de los lentes, ni te vayas rápido, el primer voto no tiene sentido sin el aplauso posterior”, decía sonriente una de las integrantes de la mesa ante la mirada cargada de vergüenza de una de las votantes primerizas.

Clarisa D'Angelo
2B TT TEA.

lunes, 22 de junio de 2009

Más candidatos



Vilma Ripoll , licenciada en enfermería y política. Trabaja como enfermera de terapia intensiva en la Unidad Coronaria del Hospital Italiano. En la actualidad es primera candidata a diputada nacional por el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) seguida por Héctor Bidonde.
Su vocación política comenzó cuando dio sus primeros pasos en la militancia en el movimiento estudiantil. Fue fundadora y primera presidente, en 1973, del Centro de Estudiantes de Enfermería de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario, conformando el gobierno tripartidario de esa facultad.
Durante la última dictadura militar fue perseguida por su desempeño y colaboración en el PST, por lo que en 1977 tuvo que exiliarse en Colombia. En ese país trabajó como enfermera y participó en la creación del Sindicato Único de Trabajadores de la Salud.
Luego de algunos años refugiada en el país vecino, Ripoll, fue delegada general del Hospital Italiano entre 1989 y 1999. En el año 2000 fue electa legisladora de la Ciudad de Buenos Aires por primera vez y reelecta en 2003.
Al año siguiente de su reelección, Ripoll, renuncia a su cargo para que otro compañero de fórmula pudiera participar de la legislatura, en relación con una aliñas entre MST y el Partido Comunista. En 2005, en el marco de las elecciones legislativas se presentó como candidata a diputada provincial por la alianza MST-UNITE, pero no resultó electa.
“La izquierda tiene la posibilidad de plantear otro proyecto de país, otro económico, político para una crisis profunda como la que vive el país y el mundo en la actualidad”, sostuvo Ripoll en una entrevista a un diario Online.


Luís Zamora, es abogado, político y militante de organismos de derechos humanos. Formó parte del partido político Movimiento al Socialismo entre el período 1983-1989. En la actualidad y después de varios años desaparecido del escenario político se presenta como candidato a diputado nacional de cara a las elecciones legislativas del 28 de junio con el partido Autodeterminación y Libertad.
Zamora dio sus primeros pasos en la militancia en defensa de los derechos humanos durante la última dictadura militar que sufrió Argentina, donde se desempeñaba como integrante del seminario juvenil de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), de la que se terminó alejando por diferencias y dicotomías con algunos miembros como el ex presidente Raúl Alfonsín.
En 1989 fue electo diputado nacional representando al partido Movimiento al Socialismo, cargo que ocupó hasta 1993. Un dato que llamó la atención que durante el desempeño de su puesto de diputado renunció al cobro de sus haberes, sustentando su economía mediante la venta de libros y el ejercicio de otra de sus profesiones: la abogacía.
Autodeterminación y Libertad, fundado en fines de 1990 junto a otros intelectuales y políticos de izquierda, es el partido político que lo tiene como líder y principal protagonista. Participó de las elecciones parlamentarias del año 2003 alcanzando el 12.3 % convirtiéndose nuevamente en diputado nacional. En 2005 en el marco de las elecciones porteñas se postuló y obtuvo el quinto lugar detrás de Mauricio Macri y Elisa Carrió, entre otros.
“Nuestro partido quiere terminar con esa idea de que los pueblos luchan y sus dirigentes los traicionan; pero el día que nos sigan a nosotros, vamos a cambiar el mundo. Ese discurso trajo muchas frustraciones”, expresó Luís Zamora en una nota al diario Crítica.

martes, 16 de junio de 2009

CREER O REVENTAR




Suerte. ¿Qué significa tener suerte? ¿Recibirnos? ¿Estar bien con la gente que queremos? ¿Encontrar el amor? ¿De qué hablamos cuando decimos es "cuestión de suerte?.
Como siempre mi cabeza hace preguntas, como siempre mi mente no encuentra respuestas directas. Por eso escribo, para ver si a lo largo de estas líneas encuentro una buena razón que me permita entender un poco más de que se trata todo esto.
Yo particularmente tengo una relación "especial" con este "factor sorpresa". Mi forma de ser, mis ideologías y manera de pensar están pregnadas por ambas, pero todavía me cuesta encontrarle la vuelta de rosca a lo que el común de la gente llama SUERTE.
Como todo creo que la SUERTE, tiene dos partes, dos esencias que se conjugan en forma constante. Dos caras que no se ven pero que no pueden vivir ni coexistir la una sin la otra. Sería algo así como la BUENA y la MALA suerte. Ambas viven en nosotros, reinan y a la vez gobiernan a su manera.Decir que tenemos buena o mala suerte es tan subjetivo como todo lo que hacemos. Por que tenemos un pasado que nos hizo crecer y cambiar, un presente que transitamos y un futuro que nos produce incertidumbre y ansiedad. Por todo esto ser objetivo es sumamente difícil.
Creo que las personas que dicen tener buena suerte lo hacen teniendo en cuenta el resultado final de un balance de todo lo que vivimos, de sumar más logros que frustraciones, más risas que llantos, más alegrías que tristezas.
La buena y la mala suerte existen, pero depende de nosotros la importancia que tengan. Ambas
aparecen en nuestras vidas, una antes, otra después o también casi en forma simultanea.
Por ahí llamamos mala suerte a las cosas que se frustran y se estacan. A los malos momentos vividos y las situaciones difíciles. Por ahí no queremos ver que las cosas pasan por que tienen que pasar y además por que tienen una verdadera razón de ser, que en el fondo nos quiere demostrar que hay algo que no esta bien, puede ser producto de una falla propia o no, pero falla al fin.
Decir que tenemos suerte o que fue "cuestión de suerte" también es una forma de subestimarnos, de no creer que si logramos todo lo que logramos, si nos superamos y pudimos avanzar, es producto de nuestro trabajo, de nuestra vocación y de nuestras ganas para que las cosas salgan bien.
Pensar que fue resultado de la buena suerte es etiquetar lo que nos pasó, enfrascar eso que tanto nos costó y simplificar las cosas.
Es verdad que hay personas que disfrutan mucho más que otras de los beneficios de la buena dicha mientras que otros lidian con la mala suerte y sus golpes bajos. Pero todos tenemos un poco de las dos, ningún ser es plenamente correspondido.
Nadie a inventado aún y sería un gran hallazgo de la naturaleza encontrar la fórmula para tener buena suerte eternamente. Pero creo que esa inestabilidad, ese desequilibrio que genera la puja entra buena y mala suerte es lo que hace que no crucemos los brazos, que no nos conformemos con poco y que sigamos luchando por más.
Yo soy una persona que me jacto de tener mala suerte. Y si a los hechos me remito, puedo enumerar un sin fin de situaciones pregnadas por la mala dicha. Pero quizás decir que las cosas que me frustran, me dan miedo y me paralizan son producto de la mala suerte también es una forma de considerame muy poco inteligente. Es una forma de querer tapar el sol con las manos, de no hacernos cargo que no todo salio como pensabamos y que aunque sea doloroso nos equivocamos.
Casi como un acto-reflejo típico de la raza humana, nos acostumbramos desde chicos a depositar la culpa, nuestra culpa en otros o atribuirles los fracasos, nuestros fracasos, a esas cosas de la vida, en este caso la MALA SUERTE.
Todo en algún momento disfrutamos de los beneficios de los logros obtenidos y a la hora de reconocer como se dieron las cosas nos adjudicamos los méritos propios pero le otorgamos puntos a la buena suerte que en ese momento " nos jugó una buena pasada". Y cuando nuestros proyectos se caen la acción maligna de la suerte es la real protagonista y culpable.
Esa forma de actuar nos hace ser cada vez más inmaduros y poco transparentes. Que lo que tanto queremos no se de o quede truncado no es sólo cuestión de suerte definitivamente.
Si tan solo por unos minutos pudiéramos mirar más arriba de nuestro ombligo y pensáramos, nos daríamos cuenta que siempre hay alguien que está peor, que no puede ver ni la mitad del vaso lleno y mucho menos vacío. Que no sabe lo que es llorar de risa, compartir momentos con las personas que queremos y mucho menos sentirse valorado y útil.
Buena y Mala suerte. Ellas luchan constantemente para ver cual se apodera de nosotros en forma completa, pero saben que es imposible. Saben que para que la buena dicha sea protagonista necesita que la mala suerte este ahí, latente intentándole hacer sombra y poniéndola alerta.
La presencia de ambas me genera incertidumbre. Y es en ese momento donde entra en juego una de mis incógnitas. ¿Cuál es la línea que divide la buena suerte de mala? ¿Existe?
Verdaderamente no se la respuesta, creo tener una idea de por donde viene la mano. Creo que la línea está donde uno la quiera ubicar. Puede ser más o menos tangible en relación con la importancia que le demos nosotros.
Se dice que siempre en lo bueno hay algo malo y que en lo malo hay algo bueno. Creo que en la suerte se da algo parecido. Consideranos personas con buena suerte, nos hace estar confiados por demás y con la guardia baja. Como así también pensar que solo contamos con la mala dicha nos posiciona pesimistas y poco esperanzados ante la adversidad. Y no nos damos cuentas que ambas, tienen efectos que nos pueden quebrar. Los coletazos de la mala suerte pueden transformarse en el principio del fin, porque aparece no avisa pero si otorga un puñado de consecuencias y no da explicaciones, en tanto la buena suerte tampoco entrega telegramas de presentación, solo se instala y puede romper ese viejo esquema que vive con nosotros hace tanto tiempo.
Quizás sea hora de comenzar a pensar en la suerte cuando aparece, pero no juzgar a priori cada situación que se nos presenta. Ver que hay algo que va más allá de la buena o mala suerte. Por que si a esta altura nuestra vida se rige en base a ella es hora de hacer borrón y cuenta nueva. Y empezar a darnos cuenta que estar vivos pasa por otro lado muy distinto donde la suerte solo es cuestión de creer o rebentar.
Creer en la buena suerte y rebentar con los efectos de la mala. Pero nunca abandonar a mitad de camino.


Clarisa D'Angelo-

miércoles, 10 de junio de 2009

”Mi despido tuvo nombre y apellido: Carlos Saul y Constacio Vigil”


Fanny Mandelbaum, una periodista fuera de serie



Ácida, transparente y sin rodeos. La conductora habla de su relación con Telefé once años después de haber sido despedida del canal sin previo aviso. Da nombres y no se achica. Aporta su mirada crítica sobre la televisión y cuenta que varias veces se sintió censurada.


En su departamento ubicado en Barrio Norte, decorado con grandes muebles antiguos y cuadros, entre los que se encuentra uno que el propio Quino le regaló a su hijo, Félix, cuando era chico, Fanny Mandelbaum termina de comer su almuerzo bajo en calorías y se ubica en sus sillones blancos .Ahora sí esta lista para comenzar la charla en la que procura hablar de todo.
Autentica y fiel a su estilo la ex conductora de Grandiosas no titubea a la hora responder, se permite reír y a la vez llorar recordando aquel Martín Fierro que ganó cuatro meses después de haber sido despedida de Telefé. Café de por medio Fanny tiene la palabra.

Una combinación explosiva: Televisión, rating y censura.
Uno de tus anhelos es poder conformar un grupo donde periodistas independientes puedan tener una radio y un programa propio para poder expresarse libremente. ¿Cómo surgió esta idea? ¿Alguna vez te sentiste censurada?
FM: Muchas veces me sentí censurada. Cuando trabajas para un medio grande siempre hay alguien que dice "no de este tema mejor no hablar". Una de las cosas que más bronca me daba de la TV era cuando insinuaba que quería hacer una nota con mujeres golpeadas, con madres adolescentes, era descalificada como si los únicos que miraran televisión fueran los hombres. Entonces eso es censura. En los noticieros no hay una sola nota que tenga relación con la mujer y para que aparezca tiene que ser un caso como el de María Marta García Belsunce. Por todo esto surgió la idea, espero algún día poder hacerlo.
¿Por qué pensas que en los medios no se habla de estos temas?
FM: Los medios más que periodísticos son comerciales. Lo que importa en este momento son las cosas que tengan rating. Pero tampoco creo que sea eso porque hay cosas a las que no se la da la oportunidad. Se prueba tres semanas si no funcionó lo levantan del aire. Son grupos comerciales quieren, productos que le den rating y piensan que los temas que tienen que ver con la mujer no pueden ser exitosos.
Se olvidan de que el 53 por ciento de la población es mujer y que ellas son las que más miran televisión.

¿Cómo ves al periodismo hoy en día? ¿Crees que tiene el espacio que se merece?

FM: La TV abierta no tiene programas periodísticos. CQC y TVR son lo más periodístico que se ve en la televisión. Esta todo en el Cable y los programas te venden el espacio. Para hacer periodismo independiente tenes que buscar auspiciantes y eso es carísimo.

¿Por qué crees que no se le da lugar al periodismo?

FM: Eso habría que preguntárselo a los Directores de programación de los canales. Ellos dicen que a la gente no le gusta y es mentira en un programa de Cable Jorge Lanata hizo cinco puntos de rating.

A título personal... ¿Cuáles crees que son los motivos por los que hoy no estás en Telefé o Canal Trece?
FM: Yo nunca golpee puertas. Para Grandiosas me llamaron, nunca se me hubiese ocurrido estar. Cuando fue lo de Canal 7 me llamó Mex (Urtizberea) para estar en Mañana Vemos. Todo el mundo tiene mi teléfono y mi mail si alguien creyera que le sirvo para trabajar me llama. Es una cuestión mía equivocada o no. Gracias a Dios me puedo mantener sola. Además a mi no se me caen los anillos. Yo puedo ser remisera o laburar de cualquier cosa.

Dos grandes desafíos: Grandiosas y su trabajo en Mañana Vemos en la TV pública
¿Cómo fue pasar de hacer periodismo de investigación a Grandiosas? ¿Fue algo que te benefició?

FM: Fue un desafío. Yo soy divertida en la vida diaria no es que sea dramática, me tocan notas fuertes, me involucro y las siento. Dije "pruebo" total eran tres meses, no perdía nada y funcionó.
Fue algo que me benefició porque me aportó un público diferente. Un público que no veía noticiero. La gente joven, los chicos ahora me paran a la salida de un colegio y me llaman por mi nombre.

¿Creés que hacer Grandiosas fue parte de buscar otro estilo?

FM: No pensé. Soy bastante inconciente. No pienso mucho las cosas, soy intuitiva, es cuestión de piel. Cuando me llamaron me pareció muy divertido el proyecto. Cuando tuvimos la primera reunión y conocí a Laura Oliva me gustó mucho como era ella, Karina (Mazzocco) era muy diva en la primera reunión. Se formó un muy buen grupo de trabajo. Ya pasaron cinco años desde que terminó el programa y con Laura, más que nada, nos seguimos viendo.

Durante dos años estuviste haciendo Mañana Vemos... ¿Cómo fue trabajar en Canal 7?

FM: Yo tenía muchos prejuicios. Tenía motivos concretos para decirle que no. La idea era atractiva, pero pensé "yo nunca estuve metida en un canal oficial". Por otro lado era linda la oferta, fui gambeteando, me dediqué a tomarme vacaciones. Me llamó Mex (Urtizberea) que me necesitaba porque Carla (Czudnowsky) se iba de vacaciones. Le dije que no. Me llamó Carla, me pidió que por favor acepte porque sino se podía ir de vacaciones y firmé por quince días.
Hice los 15 días y me fui. Después empezaron a llamarme de nuevo, al principio no quería, pero arreglé y fui porque me sentí cómoda, dije lo que quise. En esos dos años nadie me bajo línea. Cuando venían políticos preguntaba de todo, cuando tuve que criticar a Moreno lo critiqué, cuando tuve que criticar la mentira del INDEC lo dije y cuando tuve que decir lo que yo pensaba sobre el campo hice.
Mañana Vemos... ¿Terminó por una cuestión de contrato? o ¿Hubo otros motivos?
FM: Terminó porque era por un año. Hicimos dos años y Mex estaba metido con Los Exitosos Pells, se complicaba mucho. Quedó todo bien con el canal, de hecho Mex empezó un programa a la medianoche y Carla tiene su propio ciclo a la tarde.

Sin previo aviso: El despido masivo en Telefé en 1998
¿Cómo fue ese fin de año de 1998 cuando vos junto con otros colegas fueron despedidos? ¿Iniciaste una causa legal?
FM: Fue terrible. Yo trabajé hasta el 25 de diciembre y después me tomé franco compensatorio para ir a visitarla a mi hija a Uruguay. Estábamos el 2 de enero en la playa y mi marido que leyendo Clarín me dice "uy hubo despidos en Telefé" cuando quise ver me dice "Esperá sos la primera en la lista", así me enteré. Fue sin previo aviso a todos nos hicieron lo mismo fuimos despedidos sin causa. Fue un verdadero shock.
Como yo no recibí el telegrama el 4 de enero me presenté igual. Me quedé para que me den una explicación pero todos se pasaban la bola nadie se hizo cargo.
Hice juicio porque me querían dar el 70 por ciento de mi sueldo. Como tenían el derecho de echarte sin causa también tenían la obligación de indemnizarme como correspondía. Me ofrecieron dos tercios. Mis amigos me decían "mejor un buen arreglo que un mal juicio", pero era un problema de dignidad, ganara o perdiera. Demoró dos años gané y me pagaron lo que debían, después me agarró el corralito.
¿Cómo es tu relación con Telefé hoy en día?

FM: Yo nunca tuve problemas con Telefé. Esto tiene nombre y apellido: Carlos Saul, el apellido no lo voy a dar y Constancio Vigil hijo que estaba en el directorio, era el dueño del canal. Vigil le llevaba los palos de golf a Carlos Saul y quién sabe cuantas cosas más.
Yo era abiertamente una crítica del régimen menemista.
Como a mi me mandaban a hacer una nota y yo decía "los jubilados se están muriendo de hambre", "los hospitales
no tienen medicamentos", "esto funciona mal" y nadie podía taparme la boca, yo no servía. Esto fue un conflicto político. Tuvo que ver con el menemato.

Esa fue uno de las peores situaciones que te tocó vivir en tu carrera... ¿Cuál fue uno de los momentos más lindos?

FM: El momento más feliz de mi carrera fue el Martín Fierro que me gané cuatro meses después de que me echaron de Telefé. Pero esto tiene una explicación: cuando me echan, mis nietos que eran chiquitos, me preguntaron ¿Por qué me habían echado? entonces trate de explicarles.
Y cuando me dieron el Martín Fierro pude decir públicamente que a uno no siempre lo echan por hacer las cosas mal. Ahí yo puede demostrar que los que se tenían que haber retractado eran los del canal. Pude decir todo lo que tenía acá adentro.

Sueños, proyectos y anhelos

Para Fanny Mandelbaum los proyectos son la fuente que le
permite mantener viva su imaginación. Fiel a esto la periodista lejos jactarse por su trayectoria, busca todo el tiempo innovar y explorar por lugares donde todavía no transitó. Se dice que para vivir la vida hay que plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. Este último "mandamiento" forma parte de uno de sus desafíos. Además la "Rusa”, como la llama la gente que la conoce, no deja de soñar y fantasear con un programa a la medianoche donde no falte la buena música y la poesía.
"Escribir un libro es un proyecto. Hace poco Edgardo Miller creó Historias de movileros: la calle. Me llamó para que hiciera el prólogo, porque, según él, soy la más veterana de las movileras. Hice mi participación y conté una anécdota. Y después cuando leí el libro recordé muchas más y me dieron ganas de redactar uno, que no tenga orden cronológico para contar cosas que me pasaron", expresó Mandelbaum.
Siguiendo con la corriente de lectura, uno de las cosas que más le gusta hacer en sus ratos libres, la periodista quiere cristalizar en hechos un programa propio a la medianoche con un enfoque cultural. "Hacer un ciclo a la nocturno que tenga que ver con música romántica, bossa nova, blues y leer poemas y trozos de libros porque eso hace que la gente quiera seguir leyendo", sostuvo la ex conductora de Mañana Vemos.
Siempre con mucho sentido del humor Fanny ironiza sobre sus gustos y asume que la cargan por su debilidad por los boleros. "Me dicen que soy una vieja por el tema de los boleros. Ya se van a dar cuenta que es mucho más divertido bailar un lento. Que vuelvan los lentos!" dijo sonriendo.

miércoles, 3 de junio de 2009

Conocelos un poco más


Laura Alonso, actual candidata, en quinto lugar, a diputada nacional por el PRO acompañando a Gabriela Michetti de cara a las Elecciones Legislativas del 28 de junio. Para presentarse decidió renunciar a la Dirección Ejecutiva de Poder Ciudadano, en la que desempeñaba desde hace varios años.
Durante su época universitaria, Alonso, militó en Franja Morada pero decidió irse a estudiar a Londres para adquirir mejores conocimientos. En 2001 y con la crisis económica, política y social en puerta, volvió al país, sin trabajo pero aún así se quedó. Fue en ese momento cuando comenzó a colaborar con Poder Ciudadano. Además fue asesora en la Secretaría de Promoción Social porteña y en el PAMI.
“Es importante que líderes de la sociedad civil se incorporen a la gestión pública u otros espacios públicos. Si mi caso sirve para que se contagien otros partidos, bienvenido sea. No hay polémica con el estatuto en la organización. Hasta donde entiendo, respeté el código de ética interno. Si Poder Ciudadano decide revisar su norma interna, es una decisión de la organización”, sostuvo Laura Alonso, en un nota al Diario Perfil.
En la actualidad sufrió acusaciones por parte del Ministro de Justicia, Aníbal Fernández, quien denunció que la, ahora, candidata a diputada nacional habría trabajado, para Poder Ciudadano y al mismo tiempo haber mantenido contactos políticos con el machismo.
"Niego todo tipo de vinculación o militancia con el PRO, y más aun haber cobrado dinero del PRO. En ambos sentidos el ministro de Justicia miente", replicó Alonso

Fernando Pino Solanas, su vocación política comienza a partir de un incidente. En 1991 sufre un ataque contra su persona cuando dos desconocidos lo balearon, tres días después de haber criticado al presidente Carlos Saúl Menem en declaraciones a un diario. Fue uno de los diputados y fundadores de Frente Grande, se presentó como candidato a presidente en 2007 y actualmente encabeza la lista para diputado nacional por el partido Proyecto Sur.
En 1992 Pino Solanas se postuló a senador nacional por la ciudad de Buenos Aires, pero su primer intento para meterse en el ambiente político no arrojó buenos resultados. Pero tuvo su revancha al año siguiente cuando asumió como diputado por Frente Grande, además se entró como convencional constituyente para la Reforma de la Constitución Argentina de 1994, de la que se termina alejando un año después por diferencias con Carlos “Chacho” Álveres.
Solanas fue candidato a presidente por la República Argentina en las elecciones de 2007, por el Proyecto Sur y tejió alianzas políticas con el Partido Socialista Auténtico con Ángel Cadelli como compañero de fórmula, obteniendo el quinto lugar.
En 2009 no quiso quedarse a fuera de la pelea electoral de cara a las elecciones del 28 de junio. Encabeza la lista como candidato a diputado nacional junto con Alicia Argumedo y Jorge Cardeli por el Proyecto Sur, obteniendo el tercer lugar en las encuestas por debajo de Alfonso Prat Gay(Acuerdo Cívico y Social) y Gabriela Michetti(PRO).

Ricardo Gil Lavedra, es abogado, político y juez reconocido por haber sido miembro del tribunal que en 1985 condenó a a la Junta Militar de 1976- 1983. Actualmente se postula junto a Alfonso Prat Gay y Elisa Carriò, ocupando el segundo lugar, como candidato a diputado nacional para las Elecciones del 28 de junio por el Acuerdo Cívico y Social.
En 1973 comenzó a trabajar en la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires bajo el cargo de Secretario Relator del Ministro.
Luego de varios años de trabajo fue elegido, en 1988, por el presidente, Raúl Alfonsín, para ocupar el puesto de Vice-ministro del Interior.
En 1999 la política le da una oportunidad diferente, donde la responsabilidad era aun mayor. El presidente de ese momento, Fernando De la Rúa lo designa como Ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. En 2001 Gil Lavedra se encuentra frente a nuevos proyectos. Entre los años 2001 y 2003 se desempeñó como Juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y entre el periodo 2002/2005 fue Juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Las próximas Elecciones Legislativas de junio son su último objetivo. Acompañando a su amiga y compañera de fórmula, Elisa Carrió y apostando a la inteligencia de Alfonso Prat Gay, Gil Lavedra conforma la lista por diputado nacional del Acuerdo Cívico y Social que se encuentra segunda, según las encuestas, detrás de Gabriela Michetti.
“No vivo de la política ni nunca viví de ella, pero creo que hay un momento en el cual uno debe poner el cuerpo si quiere tener un país que coincida un poco con sus utopías y sueños”, sostuvo en declaraciones a un diario digital, Ricardo Gil Lavedra.

Gabriela Michetti, es Licenciada en Relaciones Internacionales. En la actualidad de desempeña como política de Unión PRO y se encuentra primera en la lista por este partido como candidata a diputada nacional para las elecciones legislativas. Para presentarse, renunció a su cargo como Vice Jefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a mitad de mandato.
Sus comienzos en la política estuvo marcado por su participación en las filas de la Democracia Cristiana donde seguía a Carlos Auyero como militante de la agrupación Humanismo y Liberación. Pero su peso político comienza a crecer de la mano de Mauricio Macri.
En 2003 se incorpora al Partido Compromiso para el Cambio, dirigido por el actual Jefe de Gobierno Porteño siendo elegida, ese mismo año, como legisladora de la Ciudad de Buenos Aires, cargó que ejerció hasta 2007.
Ese año, Michetti, ya relacionada íntegramente con Unión PRO, es elegida Vicejefa de Gobierno al ganarle las elecciones a la dupla Filmus-Heller con el 45, 62 por ciento de los votos.
El 20 de abril de 2009, promediando la mitad de su mandato y luego de varias idas y vueltas, Gabriela Michetti decide renunciar a su cargo para ser primera candidata como diputada nacional por el PRO, para las elecciones del 28 de junio asentando, de esta forma, su oposición a las candidaturas testimoniales, utilizadas por varios partidos entre ellos el PJ encabezado por el ex presidente Néstor Kirchner. Todas las encuestas la dan como ganadora por amplia mayoría.

Alfonso Prat Gay, es Licenciado en Economía. Siendo muy joven integró el equipo de trabajo de J.P Morgan. Además fue presidente del Banco Central de la República Argentina durante el periodo 2002-2004. En la actualidad con 43 años y dueño de una larga trayectoria, encabeza la lista del Acuerdo Cívico y Social junto a Ricardo Gil Lavedra y Elisa Carriò para las próximas elecciones del 28 de junio, donde las encuestas lo ubican segundo, después de la candidata del PRO, Gabriela Michetti.
A los 28 años y recién casado, Prat Gay, viajó a los Estados Unidos para realizar una maestría en la Universidad de Pennsylvania. Fue el número del banco J.P Morgan en Nueva York, Londres y Buenos Aires. Luego de varios años viviendo en el extranjero y en plena crisis económica de 2001 regresa a la Argentina para, un año más tarde, ocupar un lugar clave en la economía del país: asumió como Jefe del Banco Central, elegido por el ex presidente Eduardo Duhalde.
Alfonso Prat Gay estuvo en el ojo de la tormenta cuando en 2003 la Ministra de Salud, Graciela Ocaña, por entonces integrante del ARI, recordó que la Comisión Especial Investigadora sobre Fuga de Divisas emitió un informe en el que figuraba el nombre del economista en un listado de personas que habían girado plata al exterior. Ante dicha acusación Prat Gay acudió a la AFIP para aclarar y demostrar que solo era una denuncia mediática sin fundamentos.
“Para defender la autonomía de la Ciudad se necesitan los votos de los diputados de todas las provincias y hoy el Acuerdo Cívico y Social es el único que garantiza un proyecto de gobierno para el 2011 en todo el país”, esbozó Prat Gay en plena campaña política.

lunes, 1 de junio de 2009

Las Cosas, como Son

Buscar lo queremos, encontrar lo que ansiamos, crear lo que nos gusta y terminar con lo que nos hace mal.Abrir los ojos y ver que estamos vivos, que tenemos un ¿Por qué? un ¿Cómo? y un ¿Cuándo?. Que hay razones sustanciales por las que debemos luchar, ideales que debemos respetar e injusticias que no deben volver a suceder.
Tenemos que dejar de perder el tiempo buscando respuesta y lógica a todo lo que ocurre. No hay que pensar por demás, hay que dejar que las cosas cumplan su ciclo natural, que nazcan, crezcan y mueran. Que nos provoquen felicidad o dolor, o tal véz las dos cosas. Uno cree saber porque ocurre cada cosa y a veces estamos tan alejados de la verdadera causa, que nos convertimos en elementos nocivos hacia nosotros mismos. Nos boicoteamos de una forma violenta y reclamos repudio por aquellla maldita situación que nos desestabilizó, que nos corrió la linea de llegada y provocó un sacudón dificil de contener.
Buscamos cambios, nos irritan los estacamientos, pero cuando las cosas se mueven nos sentimos ajenos de nuestra propia historia, desconocidos de los recuerdos que forman parte de nuestro ser y amnésicos de nuesto entorno. Renegamos de lo que nos falta, reprochamos de lo que tenemos y así pasamos la vida entre preguntas retóricas que esperan una respuesta, utopías alimentadas por ilusiones y sueños fundados en iseguridades propias.
Y no nos damos cuenta, o quizás si, que el sentido de todo esto es aceptar cada golpe, cada piedra, cada señal. Agarrarlas, observarlas y hasta estudiarlas. Buscarles la relaciòn, la esencia y la utilidad. Y recién en ese momento, cuando adoptamos y procesamos que lo está junto a nosotros, lo que nos rodea y forma parte de nuestro contexto, en el que día a día nos movemos, tiene un razón de ser, una señal que percibir y una enseñanza que nos hace crecer y madurar.
Por eso adopto, desde hace un tiempo, y después de haberme dado la cabeza contra la pared una y otra vez, una postura distinta. Opto por entender que las cosas que nos pasan, tienen una simple razón: deben suceder.
Quizás para demostrarnos que no estamos haciendo las cosas bien, que el camino por el que venimos y pensamos que era el más adecuado no lo es, o hacernos saber que falta algo para que el curso de las cosas vayan por una vía relativamente normal.
Aprender esto muchas veces duele y molesta pero es tan necesario como respirar. Darnos cuenta que muchas veces el porque de las cosas no tienen la razón que nosotros esperamos y sobre todo entender que el engaño contra uno mismo no hace màs que crear falsas esperanzas, provocando que el golpe sea todavía más duro.
Es mucho mejor ver las distintas instacias de la vida como son. Porque si son crueles o oscuras desde un principio las vamos a poder manejar mejor, vamos a saber que está bien y que está mal que debe cambiar y que debe seguir como hasta ahora.
La honestidad nos marca a fuego si la sabemos utilizar y nos prepara a prueba de balas. Nos hace fuertes y recistentes. Pero no inmunes. Hay sentimientos tan fuertes que traspasan cualquier tipo de coraza, hasta la que parecía mas dura.
Por todo esto es nesario saber donde estamos parados y porque vamos hacia donde vamos. Por que en cualquier momento de un golpe y sin rodeos la vida se encargará de dar esas descargas, que nosotros llamamos cambios, a veces drásticos otras veces no tanto, donde se produce un quiebre de nuestra rutina obligandonos a reacomodar todo y porque no? agregarle cosas nuevas.
Con o sin ganas hay que seguir, no tirar todo por la borda y sobre todo evitar que el cambio nos despegue los pies de la tierra. Porque si eso pasa el cambio no solo será cambio sino también un reflejo de todo lo que pensamos y no decimos, soñamos y no concretamos y sentimos pero no expresamos.
Por que hay que dejarlo ser, no importa como, no hay manuales ni escuelas donde se explica y se aprende, cada uno, a su manera, sentirse mejor y enfretar el día a día de la mejor manera posible, teniendo siempre presente, que las cosas son como son y de eso nadie queda afuera, por más intentos que se hagan no se puede salir del sistema. Hay que aprender a convivir con él.